El Dr. Lionel Gil Hormazábal fue distinguido como Profesor Emérito de la Universidad de Chile, reconocimiento a una vida dedicada a la ciencia, la docencia y la investigación interdisciplinaria en el ámbito nacional e internacional. Su discurso de aceptación, emotivo y reflexivo, repasó los hitos de una carrera marcada por el compromiso con la excelencia y el impacto público del conocimiento científico. Inició su trayectoria académica en la Facultad de Medicina en el año 1964 como académico de la Cátedra de Química. Uno de los momentos más entrañables de su recorrido fue su participación en el grupo de investigación liderado por el Dr. Moisés Agosín, con quien estudió los mecanismos de inducción enzimática en la resistencia a insecticidas. Posteriormente, obtuvo su doctorado en la Universidad de Cornell, Estados Unidos, orientando su labor hacia los problemas medioambientales, área en la que sus aportes sentaron bases fundamentales para regulaciones en Chile, Estados Unidos y Japón.

La Dra. María Margarita Préndez Bolívar hizo historia en la Universidad de Chile al convertirse en la primera mujer titulada como Química, en al año 1966. En una época marcada por barreras de género, supo abrir camino con convicción y vocación, compatibilizando su rol como madre con una incansable dedicación a la docencia, la investigación y el servicio académico. Su línea de investigación se ha centrado en la química atmosférica, disciplina que estudia los procesos químicos que ocurren en la atmósfera, influenciados por factores como la radiación solar, la temperatura, la presión y los vientos. Su mirada científica, siempre sistémica y conectada con los desafíos ambientales, ha contribuido significativamente a la comprensión de los contaminantes atmosféricos y sus impactos. Paralelamente, se ha especializado en química nuclear, estableciendo un puente disciplinario coherente y visionario entre dos áreas críticas para el cuidado del planeta. Como académica, la Dra. Préndez ha formado generaciones de estudiantes, transmitiendo no sólo conocimientos, sino también una profunda pasión por la ciencia y una actitud reflexiva frente al rol social de quienes la ejercen.